Volvo Cars, marca representada en Colombia por Astara, anunció que continuará destinando recursos a su planta de producción en Ridgeville, Carolina del Sur, con el objetivo de alcanzar en los próximos años la plena utilización de su capacidad instalada.
En la última década, la compañía ha invertido más de 1.300 millones de dólares en la planta, que hoy cuenta con una capacidad de producción anual de 150.000 vehículos y desempeña un papel estratégico junto a las fábricas de Europa y China. Actualmente, en estas instalaciones se producen el Volvo EX90, SUV 100 % eléctrico, y el Polestar 3.
Un primer paso hacia la optimización de la capacidad ya fue anunciado: a finales de 2026, la planta sumará a su línea de producción el Volvo XC60, el SUV mediano más vendido de la marca, que en los primeros ocho meses de 2025 ya superó las 27.000 unidades vendidas en Estados Unidos, un crecimiento de casi 20 % frente al mismo periodo del año anterior.
El compromiso fue respaldado también por las autoridades locales. El gobernador de Carolina del Sur, Henry McMaster, destacó: “La decisión de Volvo Cars de invertir aún más en Ridgeville refuerza la posición de nuestro estado como líder nacional en manufactura automotriz y refleja la confianza de las principales empresas del mundo en nuestra fuerza laboral”.
De cara al futuro, la compañía planea añadir antes de 2030 un nuevo modelo híbrido de próxima generación diseñado específicamente para el mercado estadounidense, en línea con su estrategia de regionalización de productos, manufactura y comercialización.
Con esta apuesta, Volvo Cars reafirma su compromiso con la innovación, la sostenibilidad y la expansión regional, consolidando a la planta de Carolina del Sur como pieza clave en su estrategia de crecimiento global.
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