Los altos precios en la compra de estos vehículos hacen que se involucren lentamente en el mercado, pero el rentable consumo por su doble motorización lo convierte en una buena inversión.
Los vehículos de propulsión alternativa, ha venido tomando el mercado colombiano a paso lento luego de su auge en países desarrollados; aunque han pasado más de 100 años desde su invención, solo en las últimas 2 décadas, los vehículos híbridos han tomando una fuerza que asciende en el mercado automotor en el mundo.
Los riesgos ambientales ligados a la alta emisión de dióxido de carbono, han llevado a orientar a las marcas a diseñar vehículos que ayuden a reducir los niveles de contaminación en el aire, incluyendo otro tipo de energías lejos de las fósiles, disminuyendo hasta en un 50% menos los gases contaminantes.
Las tecnologías híbridas combinan diversas alternativas de propulsión, como motores térmicos y eléctricos de tamaños muy eficientes, más silenciosos, con emisiones muy bajas, cuya potencia y torque se complementan con motores eléctricos ágiles y baterías de respaldo.
Clasificación de los híbridos
Microhíbrido: en la paradas se apaga el motor térmico, cuando se continua la marcha, un motor de arranque reforzado enciende el motor térmico usando la energía recuperada en la detención. Solo ahorra en ciclo urbano y no cuenta con motor eléctrico que impulse. Algunos cuentan con baterías adicionales o un conjunto de supercondensadores para aprovechar la energía de la frenada.
Semihíbrido o mild-hybryd: el motor eléctrico se utiliza como una asistencia al motor térmico; además es generador de energía en las frenadas y retenciones, pero no se puede impulsar de forma 100% eléctrica, aunque sí con el motor térmico sin consumir, pero moviendo sus piezas mecánicas.
Híbrido puro o full-hybrid: se puede circular en determinadas condiciones solo con el motor eléctrico, mientras el térmico está totalmente apagado y no mueve sus piezas. Este cambio puede ser de forma automática o voluntaria.
Híbrido enchufable o plug in: sus baterías son recargables mediante energía eléctrica convencional enchúfandolo, sin necesidad de otro sistema de propulsión.
El futuro está en la autoridad
El impulso de los gobiernos por implementar este tipo de vehículos ha hecho que se reduzcan los impuestos, estimulando el uso de automóviles que generen menos emisiones contaminantes al aire para así preservar la salud y reducir el consumo de combustibles fósiles no renovables. En Latinoamérica, Colombia y Argentina ya redujeron al 5% el impuesto para este tipo de movilidad eficiente.
Noruega el país europeo que no supera los seis millones de habitantes, es actualmente un referente mundial en materia de movilidad alternativa, a pesar de ser un país productor de petróleo, con un PIB del 40%, es consciente de que las energías limpias son el futuro, con una cuota mayor al 20% en vehículos de este tipo.
El futuro de la masificación de estos vehículos dependen de los avances y la disposición del país en la inversión de estas nuevas tecnologías. La falencia que tiene la llegada de estos automóviles a América Latina, es la carencia en la infraestructura y la tecnología necesaria para poderse masificar en el mercado automotor; a demás de disminuir aranceles e IVA, se deben establecer políticas publicas que brinden garantías a quienes los adquieren, como la instalación de sitios de recarga eléctrica.
Pros y contras
Las tecnologías híbridas permiten a los fabricantes de vehículos diseñarlos más ligeros y con mayor eficiencia de uso de combustible, se encuentran vehículos donde su batería puede recargarse simplemente enchufándola a la red eléctrica y al momento de terminar la carga eléctrica, encender el otro motor propulsor.
Frente a otros sistemas de propulsión alternativa, el híbrido tiene la ventaja de que funciona con combustibles que se encuentran en cualquier estación de servicio, pero con un consumo muy inferior al de un modelo equivalente no híbrido. Esto se debe a que un híbrido recupera la energía que otros modelos desperdician, ya que están muy bien diseñados en cuanto a eficiencia.
Las emisiones son muy bajas, y constituyen una tecnología muy probada, sobre todo en Estados Unidos y Japón. Cada vez habrá más opciones en el mercado que trae beneficios fiscales para su adquisición.
No requiere un mantenimiento especial y el sistema híbrido dura lo mismo o más que el vehículo, la garantía del motor eléctrico y sus baterías es muy superior a la del motor térmico y la transmisión.
Las baterías de los vehículos híbridos son altamente contaminantes si no se reciclan de la forma adecuada. Además este tipo de vehículos son más costosos que un vehículo convencional, aunque rentables.
Son más eficientes y más silenciosos, lo que también reduciría la contaminación auditiva dentro de las ciudades.
Los vehículos deben ser revisados solo por expertos en caso de contar con motor eléctrico, es indispensable el aislamiento de los cables de alta tensión, ya que son cercanas a los 400 voltios y podrían causar graves lesiones. ◣