Para tal efecto, la ANSV dispuso un equipo interdisciplinario que incluye expertos en seguridad vial, diseño de vías y especialistas en ingeniería del transporte. Este grupo especializado iniciará un trabajo de campo que permitirá identificar puntos críticos en términos de infraestructura. Posteriormente, los resultados de las auditorías serán entregados alas entidades responsables del diseño y mantenimiento de cada tramo vial, quienes deberán desarrollar las acciones necesarias para mitigar los riesgos identificados.
De manera complementaria, la ANSV inició una nueva fase del programa Pequeñas Grandes Obras, iniciativa que en su primera fase permitió realizar intervenciones de bajo costo y alto impacto, orientadas a la prevención y mitigación de la siniestralidad vial, especialmente en zonas de alto tráfico. En esta primera fase se realizaron intervenciones en 278 puntos de alta siniestralidad en 101 municipios de 27 departamentos, incluyendo 100 zonas escolares y 67 pasos urbanos, con una inversión aproximada de 35 mil millones de pesos.