El carsharing es una forma de movilidad pública novedosa, que hace más de treinta años nació en Suiza como una idea al préstamo de vehículos, brindando una solución a la movilidad con el alquiler de vehículos por periodos de tiempo, ya sean horas o minutos, dependiendo la necesidad del usuario.
Como si fuese una alquiler de bicicletas, el carsharing distribuye una cantidad específica de vehículos en zonas donde los usuarios pueden adquirirlo sin ningún límite de uso. Hay dos maneras de utilización del servicio, la opción uno ofrece una estación fija de renta y regreso del vehículo; la opción dos es de libre flotación, esto quiere decir, que puede ser rentado en una localidad específica y retornarlo a otra zona diferente a donde fue adquirido.
Crecimiento dinámico
El segmento de alquiler de vehículos crece a pasos agigantados, año tras año el auge de esta alternativa de movilidad, ha ganado más de cuatro millones de usuarios en más de veinte países en el continente de Asía, América y en especial en Europa, donde existen ya más de treinta empresas que prestan este servicio, ya sea para viajar dentro de la ciudad o salir del país.
La empresa alemana Car2Go quien lleva ocho años presente en veinticinco ciudades de ocho países, ocupa casi el cuarenta por ciento del mercado de este servicio en el mundo, consolidando su liderazgo en la renta de vehículos, con más de setecientos mil nuevos clientes ganados en el año 2017, completando casi tres millones de usuarios mundiales.
Según la empresa consultora Frost & Sulliva, se espera que los servicios de carsharing aumenten a quince millones en el año 2020, ya que este servicio ha llevado a los jóvenes a un gran desinterés por tener vehículo propio.
Los fabricantes de automóviles y empresas de alquiler son perceptivos de las preferencia y no se han quedado inmóviles al observar la popularidad del carpooling; algunas marcas ya están formando alianzas, invirtiendo en empresas emergentes y desarrollando proyectos para no dejar caer la elección del vehículo privado. Compartir el vehículo hace salir de circulación a por lo menos quince automotores de las calles, pero hay gran diferencia entre estos dos servicios.
En Latinoamérica ya son más de cinco países, que han incluido el carsharing como un complemento a la movilidad pública; en la capital colombiana ya se puede encontrar este servicio por un valor de siete USD la hora, con una amplia planta de vehículos eléctricos y más de quince estaciones de préstamo.
La empresa canadiense de carsharing Communauto, afirmó que han conseguido reducir 13.000 toneladas de emisiones de CO2.
Diferencias entre carsharing y carpooling
Aunque ambos fueron creados con el fin de disminuir el tráfico, la dispersión de gases contaminantes y ahorrar costos, son servicios totalmente distintos.
Carpooling
Esta apuesta para mejorar la movilidad tiene usuarios en todo el mundo. La metodología es básicamente, compartir el vehículo con varias personas en trayectos usuales de la casa al trabajo y viceversa, obteniendo beneficios no solo económicos, sino sociales y ambientales. A diferencia del carsharing, los usuarios pueden alternar los turnos de conducción, así como de vehículos en caso de restricciones de numeración en las ciudades donde esté reglamentado.
Son varias la empresas que ofrecen el servicio para que usuarios se puedan conectar entre ellos y así compartir horarios y rutas, esta alternativa, hace que los costos se repartan entre los pasajeros del vehículo.
A diferencia del alquiler de vehículos convencional, con el Carsharing se paga exclusivamente lo que se consume y son de muy fácil acceso, ya que hay múltiples lugares para encontrarlos.
El usuario necesita estar registrado en el servicio y poseer una tarjeta magnética que lo identifica, el vehículo dispone de un lector ubicado en el interior del parabrisas, al pasar la tarjeta por el lector, el vehículo se activa.
Ventajas del carsharing
• Economizar costos usuales del vehículo como lo son: combustible, mantenimiento, zonas de parqueo y seguro, ya que son responsabilidad de la empresa que presta el servicio.
• Menos vehículos circulando en las ciudades, lo que ayuda a reducir el tráfico.
• Respirar mejor, al ser en su mayoría vehículos eléctricos, ayuda a disminuir emisiones de CO2 encargado de agravar el medio ambiente. ◣