Su bajo costo de adquisición y consumo, así como el alcance en recorrer grandes distancias a una velocidad considerable, hizo de las motos eléctricas una nueva forma de movilizarse.
Hace unos años no existía ningún tipo de regulación en cuanto al segmento de motos y bicimotos eléctricas, el vacío legal y jurídico que este generó, llevó al descontrol de la movilidad en las ciclorutas.
La llegada de motocicletas eléctricas a Colombia y su auge como alternativa de transporte, llevó a incrementar su adquisición en más de 20 mil unidades en el año 2016. No obstante, al alcanzar velocidades considerables entre 35 y 45 km/h y no tener un seguro obligatorio en caso de lesiones y daños en colisiones, el Ministerio de Transporte emitió la resolución 160 de 2017, en la cual reguló motociclos, motos y bicimotos eléctricas, siguiendo las normas de cualquier moto, como lo son:
1. Tener Seguro SOAT.
2. Usar casco y chaleco reflectivo.
3. Deben tener instaladas luz trasera y delantera, direccionales, espejos retrovisores, placa y señal acústica o pito.
4. Certificado técnico mecánico.
5. Registrar el vehículo ante el Registro Distrital Automotor RDA.
6. Registrar el dueño ante el Registro Único Nacional de Tránsito RUNT.
7. Respetar las restricciones de velocidad y de tránsito.
8 No pueden circular en las vías para bicicletas o ciclorutas, ni mucho menos pueden prestar servicio público de transporte.
La entrada en vigencia de esta regulación afectó de manera negativa el mercado, originando una caída sustancial en las ventas para el año 2017. En el 2018 este segmento parece repuntar y volver a tomar fuerza en su comercialización, por la llegada de nuevos modelos con mayor alcance en velocidad y autonomía.
Según estadísticas publicadas por la Asociación Colombiana de Vehículos Automotores Andemos, se muestra una recuperación importante de este segmento, comparada con el primer cuatrimestre del año 2017.
La marca Auteco con su motocicleta Starker lidera la lista en matriculas ante el Runt, sin tener en cuenta las que no se matricularon a la fecha del cierre del primer cuatrimestre de 2018.
Para el presente año se espera un aumento considerable comparado a años anteriores, con la llegada de nuevas marcas japonesas y europeas con mayor autonomía y velocidad, además de marcas nacionales como AKT que anunciaron la entrada de un nuevo modelo a este segmento eléctrico.
Fácil mantenimiento
El mantenimiento tiene algunos temas en común con la motocicleta convencional, para la suspensión delantera se recomienda realizar al cambio de aceite cada 2 años aproximadamente, solo en el caso de tener amortiguadores hidráulicos. Para la suspensión trasera su mantenimiento es mas flexible, la motocicleta puede circular alrededor de 50.000 km sin tener intervención alguna.
Es importante conocer su conjunto motriz, la gran mayoría de estos viene como una unidad sellada libre de mantenimiento, lo cual no contiene partes sometidas a desgaste por uso o fricción tales como pistones, cigüeñal, válvulas, entre otras.
Realizar cambios de aceite periódicos y temas de sincronización ya no serán un problema, esto hace que su mantenimiento quede resumido y casi similar al de una bicicleta convencional en donde se revisan frenos, sistema de suspensión, cambio y mantenimiento de llantas, de baterías y limpieza.
Baterías: los fabricantes de estos vehículos recomiendan el cambio de este elemento cuando inicie a presentar fallas, por tratarse de una unidad sellada su manipulación se vuelve en una actividad de alto riesgo, debido a que maneja altos voltajes y la presencia de sustancias químicas altamente corrosivas que son perjudiciales para la salud, si no manipula de manera adecuada.
Frenos: dependiendo el peso, el diseño del fabricante y la potencia en vatios, la motocicleta está dotada de frenos de disco o frenos tipo banda o campana.
El cambio de las pastillas o bandas dependerá bien sea de los hábitos de conducción y de la forma de frenar la moto. Su cambio está asociado al estado de las mismas, generalmente estos elementos traen indicadores de desgaste los cuales son fáciles de detectar conociendo la ubicación de las mismas.
Suspensión: al igual que los frenos, el tipo de suspensión dependerá directamente del fabricante, de acuerdo a su diseño y configuración de motocicleta, así como su mantenimiento dependerá también de los hábitos de manejo y el terreno al cual se someta la suspensión.
Luces y sistema eléctrico: del buen estado de la batería, dependerá el buen funcionamiento de las luces y demás componentes eléctricos.
Los cableados y conectores son elementos de libre mantenimiento, sobre ellos se realizará mantenimientos correctivos en caso de ser necesarios. La limpieza de la motocicleta será factor determinante para que estos componentes no presenten fallos.
El mantenimiento de las motocicletas eléctricas a pesar de ser un tema sencillo y de una baja complejidad, no deja de ser un tema importante a la hora de inclinarnos por este medio de transporte, sin dejar atrás el desconocimiento y la falta de experticia en el campo, una descarga eléctrica puede ser fatal, puede llevar a gastos innecesarios, tenido en cuenta que en algunos modelos de motocicletas los repuestos son de un costo elevado.◣
Fuentes
http://www.mismotoselectricas.com/economico-mantenimiento-moto-electrica-1459.html
http://www.circulaseguro.com/la-suspension-en-la-moto-la-gran-olvidada/
https://www.tienda-moto.com/blog/mantenimiento-de-tu-moto-que-cuando-y-como/
http://www.energymotion.net/sportystreet.htm
http://www.auteco.com.co/productos/starker
Andemos
Ministerio de Transporte
Canal Capital