El fenómeno del Niño obliga a los talleres de colisión a tomar medidas eficaces para ahorrar agua en sus procesos y operar con responsabilidad social y ambiental, sin disminuir sus estándares de calidad y prestación del servicio.
A
horrar es reservar algo valioso para utilizarlo en el futuro y es precisamente bajo esta premisa que el taller reparador debe implementar algunas prácticas y conceptos mediante los cuales pueda reducir el consumo de agua.
En el sector reparador hay tres tipos diferentes de consumos de agua: consumos por limpieza, climatización y riego o jardinería; consumos para producción como parte de los procesos de lavado, pintado o limpieza en general; y consumos para uso sanitario o potable para consumo humano.
Basados en estos consumos se deben orientar las acciones encaminadas a disminuir el gasto de agua y, con esto, reducir en forma directa los residuos y el impacto ambiental.
Acciones para el ahorro del agua
El taller reparador con conciencia social y ambiental debe tener en cuenta un Programa de ahorro de recursos, el Diseño de redes y sistemas, la Reutilización de agua, el modo de Aseo de instalaciones y el Lavado de vehículos.
Programa de ahorro de recursos. El programa busca alcanzar una meta ambiental de disminución de consumo semestral asumida por el taller. Para ello deberá implementar una serie de medidas como:
Con el fin de mitigar los impactos generados por el uso de agua en las actividades del taller, se deben realizar mediciones mensuales de consumos para identificar la eficacia de las medidas implementadas en el programa de ahorro de recursos. En este programa se establecen actividades anuales que soportan el compromiso de la organización frente al uso adecuado de los recursos naturales.
Diseño de redes y sistemas1. Existen algunas consideraciones de diseño y configuración de redes que deben tenerse en cuenta para reducir el consumo de agua:
> Las configuraciones de las líneas de suministro de agua frecuentemente producen presiones de entrega más elevadas de lo necesario y, por ende, generan consumos inadecuados.
> El diseño o reforma de las redes hidráulicas y sanitarias suelen ser usadas por muchos años, por lo que es importante realizar diseños eficientes y que contribuyan al ahorro. Además, debe usarse la tecnología disponible en accesorios de bajo consumo.
> Desde el diseño inicial o reforma debe considerarse la viabilidad de sistemas de reciclaje de agua ya que la implementación posterior implica por lo general altos costos e ineficiencia.
> Los caudales suministrados por las redes suelen ser superiores a los necesitados en los procesos.
> Algunas configuraciones hacen que el agua circule innecesariamente por los circuitos sin una demanda específica.
> La selección adecuada de equipos y accesorios en la red de suministro de agua generan menores consumos sin disminuir el confort o la calidad del servicio requerido.
> Procurar la instalación de griferías y accesorios sanitarios cuyo diseño o tecnología permitan el ahorro de agua.
> Programas de mantenimiento preventivo en redes de suministro que permitan la detección y corrección de anomalías y excesos de consumo.
Reutilización de agua. La reutilización o reciclaje de agua que ya fue usada en otra operación, a veces requiere de algún tratamiento previo a su segundo uso.
> La calidad de agua usada en algunas actividades es excesiva para el uso al que se destina.
> En procesos productivos de algunas áreas puede reutilizarse más del 50% del agua consumida si se cuenta con sistemas sencillos de filtración y desinfección, muchas veces de bajo costo.
> Para porcentajes más altos (del orden del 80%) es necesario combinar varias tecnologías de tratamiento de agua: eliminación de sólidos y grasas, ósmosis inversa, ozonización, etc. Conforme aumenta este porcentaje, las instalaciones precisan mayor control y mantenimiento.
Otra opción para porcentajes altos de reutilización es una planta de tratamiento de aguas2 residuales la cual se compone básicamente de:
> Instalación de neutralización.
> Instalaciones sencillas de separación de sólidos.
> Unidades de filtración (ósmosis inversa, ultrafiltración, etc.).
> Unidades de floculación.
> Instalaciones para tratamiento biológico.
> Unidad de desinfección.
El agua producto de la condensación generada por los equipos de aire acondicionado puede ser utilizada, sin tratamiento, en actividades distintas al consumo humano. Debe considerarse la viabilidad de almacenar y utilizar las aguas lluvias en procesos que no requieran agua potable.
El agua producto de la condensación generada por los equipos de aire acondicionado puede ser utilizada, sin tratamiento, en actividades distintas al consumo humano.
Aseo de instalaciones. El principio de toda actividad, incluida la del taller reparador, es el aseo general y para ello se debe:
> Realizar el mantenimiento adecuado y el correcto uso de los sistemas de aspiración de material particulado en los procesos de pintura.
> Realizar limpieza en seco mediante aspiración, barrido, recogida manual o máquina de limpieza.
> Reducir vertidos innecesarios, accidentes y reboses.
> Uso de equipos presurizados para limpieza de determinadas áreas, dichos equipos ahorran hasta un 75% de agua.
> Controlar los vertidos con alarmas de niveles o con un sistema de paro automático de las bombas.
> Vaciar completamente los depósitos y los aparatos antes de limpiarlos.
Lavado de vehículos. La adopción de nuevas tecnologías en sistemas de lavado, aunadas a la incorporación de buenas prácticas, reduce los consumos y mejora la calidad de los vertimientos.
Es por estos que el taller debe realizar la elección de una tecnología de tipo de lavado adecuada al volumen de vehículos y particularidades de la operación. En el siguiente cuadro se comparan los consumos medios de agua según los tipos de lavado3:
Las actividades de lavado de vehículos generan contaminación difusa por vertimiento directo de productos de limpieza y contaminantes (aceites, pinturas, gasolina, metales pesados, etc.) a través de la red de alcantarillado o en el medio natural.
Por último, en la actualidad los avances tecnológicos han permitido el desarrollo de productos para la limpieza de los vehículos que permiten el lavado sin la utilización de agua, característica que permite ahorro en dicho recurso y disminución en tiempos.
Son productos no inflamables y no reactivos, con compuestos orientados a hacer el proceso de degradación que encapsula la mugre, la cual es retirada con un paño que atrae el material evitando las rayas en la pintura para hacer un proceso de brillado. ◣
1. Guía de Ahorro energético en talleres de automóviles – Dirección General de Industria, Energía y Minas, Comunidad de Madrid 2007.
2 y 3 Referencia: http://agua-dulce.org
