La movilidad eléctrica se está consolidando como una alternativa más limpia y eficiente en un mundo donde la sostenibilidad es cada vez más relevante. La transición hacia vehículos eléctricos representa un avance crucial en la reducción de la huella de carbono, pero para muchos potenciales propietarios, la preocupación sobre la complejidad y el costo de la carga en casa sigue siendo un factor importante.

Históricamente, la carga de vehículos eléctricos ha requerido instalaciones especializadas y adaptadores de carga, lo que ha supuesto un costo adicional y una barrera para la adopción de estos vehículos. Sin embargo, la tecnología ha avanzado, y hoy en día los vehículos eléctricos enchufables ofrecen opciones más accesibles y prácticas para el uso diario. Según datos de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (ANDEMOS), en lo que va de 2024, se han vendido 518 vehículos eléctricos enchufables en Colombia, demostrando un creciente interés por esta tecnología.

Uno de los avances más significativos en la tecnología de los vehículos eléctricos es la posibilidad de cargarlos directamente desde un tomacorriente estándar de 110V o 220V en casa, sin necesidad de adaptadores especializados ni depender de puntos de carga públicos. En Bogotá, por ejemplo, cargar una batería de 5.5 kWh puede costar hasta 5,447 COP, basado en un valor máximo de 990 COP por kWh. Con un promedio de 25 km diarios de recorrido, el gasto semanal en electricidad es de solo 16,341 COP, o 72 pesos por kilómetro, lo que es considerablemente más bajo en comparación con el transporte público o los vehículos a combustión.

El tiempo de carga también ha mejorado considerablemente. Usando un tomacorriente de 110V, la carga completa puede tomar alrededor de 8 horas, mientras que un tomacorriente de 220V reduce ese tiempo a 4 horas. Esto contrasta significativamente con los tiempos de carga de vehículos eléctricos más tradicionales, que pueden tardar hasta 42 horas en cargar completamente una batería de 50 kWh con un tomacorriente de 110V. La posibilidad de cargar el vehículo mientras se está en casa, descansando o compartiendo tiempo con la familia, añade una capa adicional de conveniencia.

Para optimizar la eficiencia y la vida útil de la batería, es importante tener en cuenta varios factores, como la velocidad de conducción, el uso del climatizador y las condiciones externas como la topografía y el clima. Además, aprovechar la regeneración de energía al desacelerar o frenar puede ayudar a extender la autonomía del vehículo.

Opel Rocks-e: Un Modelo Destacado

Un ejemplo de la evolución en movilidad eléctrica es el Opel Rocks-e, un vehículo eléctrico enchufable práctico, accesible y revolucionario. Equipado con un cable de 3 metros que se conecta a cualquier tomacorriente de 110V o 220V, el Opel Rocks-e facilita la carga en casa, eliminando las complicaciones tradicionales y haciendo de la movilidad eléctrica una opción más atractiva y viable en Colombia. Este modelo combina facilidad de uso con una solución económica y ecológica para la movilidad diaria.

«El Opel Rocks-e está marcando un antes y un después en la movilidad eléctrica al simplificar la carga y hacerla accesible para todos. Al poder conectarse directamente a tomacorrientes estándar, eliminamos una de las barreras más grandes para la adopción de vehículos eléctricos. Esto no solo facilita la vida de los propietarios, sino que también acelera la transición hacia un futuro más sostenible,» afirmó Julio Velásquez, líder de producto en Opel Colombia.

Con Opel, una marca 100% alemana y 0% convencional, la adopción de vehículos eléctricos en Colombia está un paso más cerca de convertirse en la norma, contribuyendo a un futuro más limpio y sostenible.

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